El equilibrio entre la rudeza de sus líneas y una elevada potencia, con tecnología que apuntan a optimizar su eficiencia y entregar una cabina con un máximo confort para viajes largos o trabajar en su interior.

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Este icónico modelo de Chevrolet trae varias novedades, respecto de versiones anteriores. Mantiene su robustez con un frontal imponente, pero su diseño y tecnología está pensada para alcanzar una máxima eficiencia. Así sus líneas aerodinámicas están trazadas para lograr una menor resistencia al viento y donde llaman la atención las tomas de aire en el parachoques delantero.
En la misma línea, su motor EcoTec3 5.3L V8, Dynamic Fuel Management (DFM) con inyección directa y Apertura de Válvulas Variable (VVT), tiene la particularidad que permite desacelerar algunos de los ocho cilindros si las condiciones no lo requieren, reduciendo el consumo y alcanzando rangos de 11 km/lt. Esta “desconexión” no se aprecia en la conducción.
Pero al ser exigido, el motor se siente y también responde con una potencia de 355 HP/ 5600 RPM y un torque de 518 nm/4100 rpm.
La Silverado Trail Boss viene con transmisión automática Z71 X de ocho velocidades, manejable con el sistema de varilla en el volante, y donde destaca una opción Low con un amplio espectro regulable.
Para la operación fuera de ruta o en condiciones más inestables, su sistema de 4×4 se complementan con varios aportes, como los controles de descenso, de freno de arrastre integrado y de tracción, junto a un diferencial trasero autoblocante automático y asistencia de salida en pendientes.
Su interior se acerca al concepto de un SUV, más que a lo que tradicionalmente se encuentra en una camioneta. Destacan los detalles en las terminaciones, lo que deja claro que no fue dejado nada de lado.
El tablero, bajo el concepto vintage, tiene indicadores digitales, pero se complementa con una pantalla de 4.2 pulgadas con control al volante, con múltiples visualizaciones de datos como combustible, velocidad, TPMS, entre otros.
Además, al centro tiene el sistema de audio MyLink, con pantalla touch color de ocho pulgadas, compatible con Apple CarPlay y Android Auto.
Como hablamos de una oficina rodante, su interior es amplio y cómodo, con muchos compartimentos para guardar todo lo necesario para operar en terreno. Incluso tiene una conexión de 220 v en el interior y otra en el pick up.
Viene con detalles como asientos eléctricos con diez posiciones, los que además son calefaccionados, al igual que el volante; como también climatizador por zonas y sunroof.
El compartimento central se puede acomodar como un tercer asiento (cinturón de seguridad incluido) y el espacio de las butacas traseras en ancho y altura son notables.
Incluso estás ultimas tienen unos espacios para guardar cosas en el respaldo.
En cuento a seguridad, a los complementos de asistencia en el manejo mencionados, viene con seis airbags; asistente de estacionamiento con sensores traseros y frontales, cámara con retroceso alta definición, frenos ABS en las cuatro ruedas y de disco con rotores Duralife. Los espejos exteriores son más largos, mejorando la visibilidad. Son eléctricos, calefaccionados y con detector de punto ciego (llama la atención que no sean abatibles electrónicamente en esta versión)
Como trasladar un tráiler es una posibilidad cierta, viene con varios complementos para la seguridad en el enganche y control del carro.
La Silverado tiene un ancho de eje mayor que versiones anteriores, favoreciendo una cabina más amplia y, gracias a la suspensión de amortiguadores traseros Rancho, tiene una manejo suave con una gran insonorización interior.
El pick up cuenta con doce ganchos y el portalón es eléctrico y se puede abrir mediante un botón, desde el interior y a distancia con el control de la llave. Este último también abre el vehículo automáticamente al portarlo y si uno se aleja de la camioneta emite una alarma y no permite que se mueva.