Superado todas las expectativas, Triumph Motorcycles cerró oficialmente la cuarta y última fase de pruebas con su primer prototipo de moto eléctrica. Entre otros parámetros, la unidad experimental ofreció una autonomía de 161 km, una potencia de 175 hp y un tiempo de carga de 20 minutos para el 80% de su paquete de baterías.

Los ensayos en condiciones reales entregaron “resultados increíbles” y establecieron “nuevos estándares para el sector”, de acuerdo con el fabricante británico. Nacida con el objetivo de crear desarrollos innovadores en ingeniería especializada en motocicletas eléctricas de altas prestaciones y diseño de tecnologías integradas, la iniciativa contó con el respaldo de Williams Advanced Engineering, Integral Powertrain Ltd y la Universidad de Warwick, mientras que su financiamiento provino de la agencia pública Innovate UK.

El prototipo de Triumph Motorcycles superó ampliamente la autonomía real de las motocicletas eléctricas disponibles en la actualidad, gracias a su autonomía de 161 km (100 millas), según las pruebas reales y los cálculos y proyecciones oficiales.

Su sistema de frenado regenerativo fue implementado con éxito y aún presenta margen para una mayor optimización en el futuro en cuanto a mayor eficiencia del generador y la transmisión, lo que permitiría mejorar aún más la autonomía de cara a las futuras motocicletas eléctricas de Triumph.

La TE-1 exhibió un nivel de rendimiento similar al de la actual Triumoh Speed ​​Triple 1200, con una potencia máxima de 175 hp (130 kW) y un par máximo de 109 Nm, que se traduce en una respuesta instantánea, con un suave control de la potencia en todo el rango de revoluciones.

Las pruebas oficiales de aceleración arrojaron marcas de 3,72 segundos de 0 a 100 km/h; 3,6 segundos de 0 a 96,5 km/h y 6,2 segundos de 0 a 160 km/h. Gracias a su electrónica más refinada, especialmente en los sistemas de control de tracción y de control de elevación de la rueda delantera, el equipo responsable del proyecto anticipó que el rendimiento podría mejorar aún más aprovechando el potencial de par para ofrecer una aceleración más ágil.

El campeón de las 200 Millas de Daytona 200, Brandon Paasch, participó en la fase final de pruebas, tanto en la evaluación del rendimiento del motor como en las pruebas en pista para la puesta a punto final del prototipo.

“La respuesta del acelerador en la TE-1 es increíble. Tiene mucho par y cuando accionas el acelerador por primera vez es una potencia instantánea, que obviamente me encanta como piloto de velocidad. Fue una gran experiencia. Tuve que probar esta máquina desde el 0% hasta el 100% y es increíblemente rápida”, analizó.

Nuevas reglas del juego

Los avances tecnológicos en materia de baterías y tiempos de carga efectuados durante el desarrollo del proyecto Triumph TE-1 dieron como resultado un revolucionario tiempo de carga de tan solo 20 minutos de 0% a 80%).

Con un peso total de 220 kg, el prototipo es hasta 25% más ligero que el resto de motocicletas eléctricas equivalentes, lo que se traduce en una increíble relación peso-potencia. Con un tamaño y escala comparables a los de una Street Triple, pero con la ergonomía, geometrías y distribución de masas de una Speed ​​Triple, la TE-1 ofrece una conducción emocionante, a la vez que inspira confianza, es ágil y compacta.

Según agregó Brandon Paasch, “sería una moto realmente agradable para la calle, simplemente por lo ágil que es y lo ligera que se siente. Ojalá la hubiese tenido en Daytona, con esa aceleración en este chasis y cómo entra en las curvas”.

Con mapas de entrega de potencia y par diseñados directamente a partir de la Speed ​​Triple 1200 RS, las pruebas en pista y las evaluaciones dinámicas confirmaron un nivel de manejo que coincide con el de los actuales modelos más deportivos dentro de la gama Roadster de Triumph con motores tricilíndricos de combustión.

Nuevo sonido eléctrico

El sonido del prototipo Triumph TE-1 es distintivo y se basa en su transmisión primaria con engranajes helicoidales. Con unos niveles sonoros testados en las instalaciones independientes de medición de ruidos de Mira, el prototipo superó con éxito todos los estándares establecidos en las pruebas de homologación R41, tanto en aceleración máxima como en ritmos de circulación urbana y por carretera.

Inmediatamente reconocible como una Triumph, la presencia musculosa del prototipo TE-1 destaca por sus icónicos toques de diseño presentes en los últimos modelos de la gama Roadster, a la vez que materializa claramente es una motocicleta del futuro.

Vestido con la carrocería y el esquema de pintura definitivos, el prototipo de demostración ostenta un estilo y una presencia 100% Triumph, con todo el ADN de diseño característico de la marca, desde su chasis de aluminio hasta su inconfundible doble faro y su actitud dominante y equilibrada.

El futuro de Triumph

El jefe de Producto de Triumph Motorcycles, Steve Sargent, calificó como “increíblemente positivas” las primeras reacciones ante el prototipo TE-1. “Muchas personas nos han transmitido que es la primera vez que ven una motocicleta eléctrica como una opción deseable y que realmente querrían tener en el garaje”, afirmó.

“Como primer paso en el desarrollo de nuestra futura tecnología eléctrica, el prototipo TE-1 y los increíbles resultados que hemos alcanzado en este intensivo programa de pruebas nos han brindado unos conocimientos y capacidades cruciales para guiar nuestro desarrollo futuro”, complementó.

Eso sí, aclaró, que el modelo de producción final “no será exactamente” como la TE-1, pero sí los integrantes de la gama “incluirán todo lo que hemos aprendido y ofrecerán el mismo y emocionante espíritu dinámico”.

Los logros alcanzados durante la fase de pruebas en condiciones reales superaron los objetivos y referencias actuales, brindando una plataforma con un “gran potencial” para el futuro desarrollo del rendimiento de las motocicletas eléctricas, expuso el director ejecutivo de Triumph Motorcycles, Nick Bloor.

“Estamos increíblemente orgullosos de poder compartir resultados tan positivos. El prototipo de demostración superó muchos de nuestros propios objetivos y expectativas iniciales. Todo el equipo está muy satisfecho con los resultados logrados junto con nuestros socios y con el hecho de que los frutos del proyecto se incorporarán al futuro eléctrico de Triumph”.

Desde Williams Advanced Engineering (WAE), responsable de colaboraciones estratégicas, Dyrr Ardash, también celebró la culminación de la fase experimental. “Desde su concepción en 2018, todos los socios aportaron con colaboración, innovación y pasión para dar vida a un prototipo que rompe con todo lo establecido”.

“Es muy reconfortante escuchar comentarios positivos de los pilotos de pruebas que confirman que la dinámica de la moto está alineada con el ADN de Triumph. Este hecho viene respaldado por el propio sistema de baterías, líder en su categoría, que WAE ha desarrollado para dar lugar a un paquete ligero e integrado. Esta tecnología nos ha permitido superar los objetivos de rendimiento y carga de la batería que esperamos ver en los sistemas de propulsión del futuro”, cerró.

Para el director de Tecnología de Integral Powertrain Ltd, Andrew Cross, la culminación del proceso supone una validación del rendimiento y la eficiencia del motor y el inversor escalables y ultraintegrados provistos por la compañía. “El propulsor alcanzó en la TE-1 cumbres de densidad de potencia y potencias continuas de 13kW/kg y 9kW/kg, respectivamente”, ejemplificó.

“Todo esto se ha logrado utilizando materiales y procesos compatibles con la producción automotriz a escala y con una plataforma de motor escalable. El concepto de escalabilidad del motor implementado en la TE-1 proporciona un trampolín perfecto para impulsar una nueva arquitectura escalable de motores y que alcanzará niveles de rendimiento similares con unas posibilidades de producción en escala mayores”, indicó.

En palabras del director ejecutivo del área High Value Manufacturing Catapult de la Universidad de Warwick, David Greenwood, cumplir con los objetivos de reducción de emisiones pasa por reconsiderar la forma en que nos desplazamos.

Para tal efecto, no basta la “transición de vehículos de combustión a vehículos de propulsión eléctrica”, sino que también debe fomentarse “un cambio de hábitos lejos de los automóviles privados. Los vehículos eléctricos de dos ruedas juegan un papel fundamental en la revolución del transporte como opción cero emisiones”.

“En nuestra asociación con Triumph, desde WMG hemos aportado nuestra experiencia en investigación de la electrificación para demostrar que los fabricantes pueden ofrecer productos con menos emisiones y con un rendimiento excepcional que ofrezca a los clientes un vehículo eléctrico divertido de conducir”, comentó el académico.